miércoles, 29 de agosto de 2012

¿De qué está hecho todo?


Cuando nos preguntamos sobre el sentido de algo, no solo encontramos la respuesta en la matería específica, como puede ser la química, sino también en la filosofía, que es la ciencia que se pregunta por cómo conocemos lo que conocemos.

La respuesta a la pregunta de que está hecho todo, encierra una multiplicidad de respuestas. Esta pregunta motiva a los docentes a integrar en sus alumnos dos modos de pensar la vida cotidiana y sus artefactos.
Es muy enriquecedor estimular el interés por los componentes de cada artefacto, aparato o alimento, así como la satisfacción al ir avanzando hacia los componentes últimos.

Con palabras sencillas, se puede explicar que hay unos pocos componentes simples de los que están hechas casi todas las cosas que podemos tocar. E incluso, que esos componentes están a su vez hechos de otros pocos componentes aún más sencillos. También se puede explicar el para qué de esos objetos.
Una frase clásica que puede valer la pena comunicar es "La materia ni se crea ni se destruye, sólo se transforma".

viernes, 24 de agosto de 2012

La química en la vida


Posteamos un artículo muy interesante, para que reflexiones con tus alumnos sobre la química en la vida cotidiana, el por qué de su importancia en la historia, en la actualidad y en el futuro. 

La química tiene una gran influencia sobre la vida humana desde los tiempos más  remotos.
La misma palabra "química" nos habla de su antiguo origen, pues según  unos viene de "khumos” (zumos), en alusión a la producción de metales a partir de  sus respectivos minerales, existiendo también la creencia de que procede de  "khemeia" que era el nombre que reciben las tierras negras de Egipto y también el  negro de la pupila del ojo -símbolo de  lo oscuro y oculto- por lo que "química"  significó en un principio "la ciencia egipcia y secreta". En las épocas remotas se  utilizaba para aislar productos naturales de utilidad en la vida diaria y buscar  nuevas aplicaciones como pigmentos, elixires, ungüentos, conservantes, perfumes  o utensilios domésticos.

viernes, 17 de agosto de 2012

¡Química hasta en las lentejas!


Con este divertido experimento podrás mostrarles a tus alumnos como las lentejas suben y bajan como locas. 

Ingredientes.
Vaso de vidrio (transparente)
Lentejas (de la alacena de mamá)
Agua.
Vinagre (también de la alacena de mamá)
Bicarbonato de sódio (en el botiquín de casa seguro hay)
Cuchara pequeña

Procedimiento
Echa una cucharada de bicarbonato en el fondo de un vaso. Añade un poco de agua, hasta alcanzar un tercio de la altura del vaso. Revuelve con la cuchara para disolver el bocarbonato. A continuación deja caer unas lentejas. Se irán al fondo.

Añade ahora, poco a poco, unas gotas de vinagre, hasta que notes que se forman burbujas  en el agua. ¿Observa lo que sucede? ¡Las lentejas suben y bajan!

Si las lentejas no suben, porque puede ocurrir -esto es prueba y error-, añade más vinagre, pero de a poco.

Resultados.
Las lentejas se rodean de burbujas que las hacen subir a la superficie del líquido. Al llegar arriba sueltan la burbuja, que se va al aire, y vuelven a caer por su peso al fondo del vaso, y sigue el proceso durante un tiempo.

Explicación.
Se produce una reacción química entre el bicarbonato sódico y el vinagre (que contiene ácido acético o etanoico). En esa reacción se forma, entre otros productos, dióxido de carbono, que es un gas, y que forma las burbujas que hacen que suban las lentejas.

Por precaución tira las lentejas usadas, no es recomendable que se usen para consumo.

Fuente: Santiago Amado Señaris.

martes, 14 de agosto de 2012

La densidad lo es todo


En química, la densidad es una propiedad que determina a un objeto. ¿Imaginas un iceberg hundido en el mar? Claro que no. Nuestra experiencia cotidiana nos asegura que es imposible, sin embargo es muy simple de lograr siempre que se lo sumerja en el líquido apropiado.

Entonces, ¿cómo lograr que un hielo se hunda?

El agua se caracteriza por presentar en estado sólido menor densidad que en estado líquido, algo muy inusual. Así la densidad del agua líquida es 1 g/ml y la del hielo 0,92 g/ml.

Si sumergimos el hielo en alguna sustancias como alcohol, bencina y otras mezclas de hidrocarburos o soluciones hidroalcohólicas observaremos lo que muestra la imagen: EL HIELO SE HUNDE.

Es interesante que puedas organizar experiencias del tipo con tus alumnos para ordenar sustancias según su densidad, si no se disponen de otros medios más precisos.

Hay química hasta en la boca


En el vídeo anterior vimos que hay química en todas partes. Y sí hay química hasta en la sopa, también hasta en la boca.

Los odontologos saben que el nivel de acidez de la boca (pH), es esencial a la hora de prevenir las caries. Cuando se ingiere cualquier alimento, pero especialmente alimentos que contienen azúcar, el ph de la boca se modifica, baja, lo que implica que la boca se acidifica. Esto provoca que el material constitutivo de las piezas dentales, comience a salir (en microcantidades) hacia el medio externo.

La saliva es la responsable de reajustar el pH, revirtiendo esta situación. En una boca sana, esto ocurre en alrededor de 20 minutos. Es por eso que es aconsejable no consumir dulces con intervalos de tiempo menores a ese.

Por otra parte, los dentífricos son ligeramente alcalinos, es decir que tienen la función de neutralizar la acidez de la boca, llevándola a su pH normal. También, en la actualidad, se sabe que los chiclets sin azúcar aumentan la secreción de saliva, facilitando la higiene bucal.

Ahora ya sabes lo importante que es cepillarse los dientes para no tener caries. Y claro, gracias a que conoces algo más de química.

martes, 7 de agosto de 2012

¡Que sería la vida sin la química!

Aquí te dejamos un vídeo que habla sobre qué sería la vida sin la química. Es un excelente material para que reflexiones junto a tus alumnos sobre el desarrollo de la calidad de vida y la química.

¡Ahora sí, no podés negar que hay química hasta en la sopa!

miércoles, 1 de agosto de 2012

Cuidado, un cable de electricidad que no es cable.

Los experimentos científicos nos ayudan a saber un poco más sobre lo que podemos hacer y no hacer. En este caso los maestros pueden enseñarle a sus alumnos el cómo y el por qué los líquidos son conductores de electricidad. 

En este experimento demostraremos como el agua, por ejemplo, hace circular la electricidad, introduciendo, además, el concepto de electrólisis y comprobando mediante el uso de un indicador que durante la electrólisis se producen reacciones químicas.

Para que no sea peligroso trabajaremos con un dispositivo constituido por una pila de 9 volt, un conjunto de cables con un terminal tipo botón para conectar a la pila, una lamparita, pinzas “cocodrilo”, un par de barras de grafito (electrodos) y un vasito de plástico.

Luego de armado el dispositivo, se conecta el terminal a la pila para comprobar si circula la corriente eléctrica. A continuación se agrega agua al vasito hasta alcanzar los electrodos y se observa que la lamparita se enciende, con lo que se verifica la presencia de energía eléctrica. Agregando pequeñas cantidades de sal al agua se logra mayor intensidad en la lampara.